Por: Área Financiera GB Consultores.
A lo largo de estos días, algunos medios de comunicación han solicitado la opinión de GB Consultores en relación a los efectos de las medidas económicas extraordinarias adoptadas por el Gobierno a raíz de la crisis del Coronavirus COVID-19. Resumimos en este post las líneas generales expuestas a lo largo de estos días.
Medidas
Las medidas adoptadas por el Gobierno son necesarias pero insuficientes (Real Decreto-Ley 8/2020, de 17 de marzo). Las acciones van encaminadas a proporcionar liquidez a las empresas mediante una línea de avales por valor de 100.000 millones en las que el Estado será garante de las operaciones financieras (línea ampliable por las entidades financieras) y una línea de avales adicional de 2.000 millones para empresas exportadoras.
En nuestra opinión, y como recomendaba la CEV (Confederación de Empresas Valencianas), la puesta en marcha de un periodo de carencia sin coste para todas las operaciones de préstamo o el aplazamiento de pago de todas las figuras impositivas habrían despejado mucho más la situación para que las empresas se centraran tan solo en los pagos derivados de gastos corrientes y de personal que podrían equilibrase con las operaciones de circulante que probablemente se realizaran al amparo de la línea de avales.
Aun así, las propuestas del Gobierno resultarán más o menos positivas dependiendo de:
- Operativa. La rapidez en su puesta en marcha y la agilidad del proceso para que en muchos casos no llegue demasiado tarde, así como del rigor en el análisis de la solvencia empresarial por parte de las entidades financieras.
- Refinanciación. Con estas medidas se podría solucionar en parte el primer problema pero no da respuesta a la necesaria refinanciación que habrá que abordar con total seguridad a partir del verano.
Las empresas han paralizado por completo sus ingresos por ventas, lo que tiene doble efecto:
- Financiero a corto plazo. Al dejar de inyectar liquidez se produce un efecto inmediato: la posición de déficit de tesorería y la incapacidad de hacer frente a los pagos comprometidos que necesita de moratorias, aplazamientos y carencias.
- Financiero a medio plazo. Hablamos de la pérdida de rentabilidad. La caída en ventas difícilmente recuperable en este ejercicio lleva a una disminución del beneficio y, en la mayoría de los casos, a la entrada en pérdidas, la disminución del EBITDA. En definitiva, la imposibilidad de generar el cash flow suficiente para atender el servicio de la deuda comprometido lo que necesitará de una reestructuración del endeudamiento financiero y una recomposición del fondo de maniobra.
Respecto a las medidas sobre cotizaciones sociales ligadas a los ERTEs también son de interés pero insuficientes dado que no todas las empresas van a acogerse a esta modalidad. Quizá una moratoria generalizada en el pago de las cuotas sociales hubiera tenido mayor impacto dado que en diez días hay que efectuar dicho pago.
Sectores
- Los sectores más afectados son los ligados al turismo que es un pilar básico de la economía española: hoteles; restaurantes, cultura, lavanderías, catering. La suspensión de las Fallas y de la Semana Santa en el sector turismo, hostelería y comercio NO tendrá recuperación en este año.
- Los sectores industriales verán una recuperación lenta y el consumo interior se ha caído.
- La exportación se va a ver afectado por una paralización y posiblemente con una recuperación posterior. Recordemos que nuestras exportaciones van mas del 60% a Francia, Italia, Alemania y Reino Unido y su situación es similar….