Por: César Bernat, Área de Subvenciones GB Consultores Financieros, Legales y Tributarios.
En las últimas semanas la Comisión Europea y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) decidieron redirigir 500 millones de euros para aumentar el apoyo a las pequeñas y medianas empresas europeas a través del plan de inversiones europeo, más conocido como Plan Juncker. Aunque ya se conocían estas intenciones, no deja de ser una buena noticia teniendo en cuenta nuestro tejido industrial.
El plan Juncker surge como respuesta a la falta de niveles de inversión aceptables en Europa a pesar de la elevada liquidez existente en el mercado por diversos motivos: baja confianza, falta de capital que se catalice en inversiones, fragmentación del mercado financiero, altos niveles de endeudamiento público, dificultades de acceso a la financiación por parte de las pymes y otros agentes… etc.
El Plan Juncker pretende recuperar el nivel de inversión normal o histórico que debido a la crisis llegó a bajar de forma muy acusada. Para conseguirlo se basa en varios pilares, el más importante es el Fondo EFSI (Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas) integrado en el grupo BEI.
El fondo EFSI tiene como objetivo incrementar la inversión en EU. Para ello se pretende conseguir unas inversiones en tres años de unos 315.000 millones de euros.
El fondo EFSI es en realidad una garantía de 21.000 millones de euros, 16.000 millones del presupuesto de la UE y otros 5.000 millones complementarios de fondos propios del BEI que buscan impulsar la inversión, básicamente privada, multiplicando por 15 los fondos destinados. Aunque se ha integrado en el Grupo BEI, tiene su propia estructura de gobierno en aras a garantizar que las inversiones se centren en el objetivo previsto.
Se centra en sectores de importancia clave y trata de apoyar proyectos económicamente viables, incluso con un perfil de riesgo algo más elevado que las normalmente financiadas por el BEI:
- Infraestructura estratégica, incluidos los digitales, transporte y energía
- La educación, la investigación, el desarrollo y la innovación
- Expansión de la energía renovable y la eficiencia de los recursos
- El apoyo a las pequeñas empresas y empresas de mediana capitalización
- No hay cuotas a nivel geográfico o sectorial, sólo se tienen en cuenta los proyectos en base a sus méritos individuales y se pueden acoger también al mismo proyecto transfronterizos
Aunque para tratar directamente con el Grupo BEI el importe mínimo del proyecto debe ser de unos 25 millones de euros, cantidad inabordable para la mayoría de las pymes, también se puede acceder a este sistema con proyectos más pequeños a través de intermediarios como las Sociedades de Garantía Recíproca, el ICO y entidades financieras colaboradoras.
Aunque nuestro plan no alcance esos límites mínimos, se trata de poder presentar ante la entidad intermediaria proyectos que sean comercial, técnica y económicamente viables, con valor añadido y que impulsen el crecimiento y la creación de empleo para que sea aprobado y poder acceder a esos fondos europeos.
Ni que decir tiene que la ayuda de un consultor experto puede facilitar la consecución de esta financiación ventajosa y que no se pierdan o dejen de realizarse inversiones beneficiosas para todos.